¿Qué es la tasa porcentual anual o APR?

La tasa porcentual anual o APR es el interés que representa el costo de los fondos de diversos productos financieros, aplicando como medida base el lapso de un año.

¿Cómo funciona la tasa porcentual anual?

Antes que nada, es importante entender que cada producto financiero emplea la tasa porcentual anual de forma variable; incluyendo en este grupo las tarjetas de crédito, préstamos e hipotecas.

A partir de esta premisa, el APR será menor en la medida que el solicitante cuente con un puntaje crediticio alto y viceversa. Es por ello que, al honrar los compromisos de pago, el cliente mantendrá una buena valoración y su interés se mantendrá bajo (caso específico que se evidencia más fácilmente con los estados de cuenta de tus tarjetas de crédito).

¿Existen diferentes tipos de APR?

Sin duda, existen diferentes tipos de APR que aplican según el tipo de transacción que se realice. Estas son:

APR de compras

Es decir, la tasa de interés que se produce al efectuar compras de manera directa, empleando para ello una tarjeta de crédito.

APR introductorio o promocional

Se trata de ofertas promocionales para captar clientes, los cuales disfrutarán de un beneficio que exonera las tasas de interés durante varios meses o las ubica en una tasa muy baja.

APR de avance de efectivo

Es la tasa más alta de todas y aplica cuando se solicita un adelanto de dinero en efectivo, sobre el saldo aprobado en su tarjeta de crédito.

APR de transferencia de saldo

Si realizas movimientos de una tarjeta a la otra, seguramente estarás generando esta tasa porcentual anual, la cual también se ubica entre las más altas.

APR de penalización

No es más que el interés de mora que se genera al producirse el incumplimiento del pago de tu deuda y suele ser una tasa mucho más alta que otras.

¿Cuál es la banda en la que se establece la tasa de porcentaje anual?

Como ya mencionábamos antes, el APR varía de un producto a otro. Sin embargo, existen valores promedio que oscilan entre los siguientes rangos:

16% para las tarjetas de crédito.

Entre 4 y 6% para las hipotecas.

Entre 10 y 15% para préstamos personales.

Por otro lado, los préstamos comerciales también cuentan con una dinámica propia, cuyos porcentajes bien puede ubicarse en un 7% o 100%.

¿Cómo puedo reducir mi APR?

Paga oportunamente el estado de cuenta de tus tarjetas de crédito.

Aprovecha los períodos promocionales para hacerte de una nueva tarjeta.

Finalmente, hay que tener en cuenta la fecha de corte del crédito para establecer los mecanismos necesarios que te permitan pagar a tiempo la deuda y evitar recargos excesivos.

Con esto asegurarás una tasa porcentual anual mucho más estable que te ayudará a saldar ese compromiso en el menor tiempo posible.